Lo ocurrido ayer en Palacio Nacional fue una contestación contundente para los detractores que le apuestan a que le vaya mal al gobierno, y por supuesto que le vaya mal a Veracruz.
Aquellos que les gusta escupir para arriba, ayer se quedaron con un palmo de narices. Javier Duarte NO se va de Veracruz y terminará su sexenio sirviendo a Veracruz y a los veracruzanos como hasta ahora lo ha hecho eficientemente en tal solo 2 años y 5 meses.
Los resultados ahí están, Veracruz es el único estado de la República Mexicana que ha podido superar una situación crítica en materia de seguridad, hoy vivimos mejores tiempos, y estamos avanzando de manera contundente en las zonas donde todavía persisten situaciones que atentan contra la armonía social.
Somos el estado con la menor tasa de desempleo del país, el INEGI lo acaba de comprobar, existe un clima de paz laboral, cero huelgas, y a diferencia de otras entidades del país, en Veracruz los trabajadores están tranquilos desempeñando su trabajo en favor de la productividad de nuestro estado y de la nación.
El gremio magisterial está tranquilo y comprometido con el bienestar de los veracruzanos. El gobierno ha podido construir una alianza con los maestros veracruzanos en favor de la calidad de la educación.
Crecemos al doble de la economía nacional, en los últimos 2 años hemos podido crear más de 230 mil nuevos empleos con seguridad social, crecemos según datos del INEGI casi al doble de la economía nacional, hemos logrado la atracción de más de 64 mil millones de pesos de inversión privada.
Hemos destinado como nunca antes recursos propios del estado para combatir la pobreza y la marginación, a través del programa "Adelante" que ya está dando resultados principalmente en las zonas de mayor pobreza, lo que nos ha valido el ser reconocidos internacionalmente.
Hemos podido estabilizar las finanzas públicas, disminuyendo los gastos y reestructurando los pasivos, para enfocar los recursos en áreas estratégicas de crecimiento económico.
Veracruz es un estado que va en una ruta clara de desarrollo no obstante las condiciones tan adversas con las que nos ha tocado lidiar.
Y en gran medida es que en Veracruz hay rumbo y hay liderazgo.
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