sábado, 20 de julio de 2013

El polvorín SAS//Ajuste de cuentas//Diario de un reportero‏

·                         LUIS VELZQUEZ

20/07/2013
Diario de un reportero
 •Embutes que no corrompen…
•El embute metido en un libro
•Rechazó Scherer el embute
 Luis Velázquez
20 de julio de 2013
 DOMINGO
“Embute que no te corrompa, ¡agárralo!”
 René Arteaga, apodado “El manotas”, alto, fuerte, corpulento, manos más grandes que las de un pianista, fue reportero en el Excélsior de don Julio Scherer García.
Igual que otros periodistas pasaba el tiempo caminando el país de norte a sur, tiempos aquellos cuando cada reportero representaba la república en sí, pues cada uno tenía un profundo conocimiento de la realidad federativa.
Cada uno de sus trabajos pertenecía al género más difícil del periodismo, como es la crónica y el reportaje que, como se sabe, la redacción gira alrededor de sus ejes centrales: uno, la rigurosidad informativa, y el dos, la calidad literaria.
Incluso, la mayor parte de escritores ha dicho que en la calidad literaria hay crónicas y reportajes que superan a las novelas, los cuentos y los poemas.
“El manotas” tenía una frase bíblica en aquellos años cuando Scherer luchaba por oxigenar el periodismo e integrar un equipo reporteril de primer nivel, íntegros, honrados, que pasearan su autoridad ética y moral de norte a sur del a nación, y era la siguiente: “Embute que no te corrompa, ¡agárralo!”. 
Claro, era ahí donde entraban los valores y los principios con que cada quien ejercía su trabajo periodístico, pues, en todo caso, quién y en base a qué establece que en ningún momento ‘’un embute’’, proveniente por lo general de los políticos, corrompe, o por el contrario, significa apenas, apenitas, un estímulo a la productividad diarística.
 LUNES
Un embute metido en un libro
 Don Arnulfo Pérez H. fue secretario particular de Tomás Garrido Canabal, el gobernador de Tabasco que más ha odiado a los curas, a tal grado que en su rancho bautizó al ganado de la siguiente manera: a una vaca puso el nombre de Virgen de Guadalupe. A un toro, el nombre del Papa en turno. A un novillo, Jesucristo. Etcétera.
En su correspondencia, y para estar a tono con el jefe, don Arnulfo Pérez H. imprimó sus tarjetas de presentación con la siguiente leyenda: “Arnulfo Pérez H. Enemigo personal de Dios”.
En el siglo pasado, hacia los años 1960, 70, llegó al puerto jarocho como administrador de la Aduana.
Y con frecuencia recibía a los trabajadores de la información y en cada visita solía regalar un libro. El último informe del presidente de la República.
Y don Arnulfo siempre lo obsequiaba con una sonrisa gigantesca que se multiplica en sus ojos y en la nariz que le titilaban como un toro en acecho cuando el reportero descubría el título del libro.
Entonces, “el enemigo personal de Dios” que había sido en Tabasco pronunciaba, con una sonrisa, la siguiente frase salvadora, llena de optimismo y esperanza: “Mire, cuando salga de mi oficina tire el libro en el cesto de la basura. Pero antes, lo abre en esta página”.
Y don Arnulfo, con una risa maratónica, mostrando la dentadura plástica, abría el libro en la página donde un sobrecito blanco, lleno de billetitos, hacía agradable el día para el reportero.
 MARTES
El reportero que devolvía “el sobre”
 Los compañeros de trabajo aseguraban que Rodolfo Guzmán era hijo de “El Santo”, el luchador del siglo pasado, porque tenía un cuerpo igualito al suyo: de mediana estatura, con una panza gigantesca, pero fuerte y resistente, unos brazos y manos de luchador.
En realidad era un reportero con mucha experiencia en el campo de batalla, y también, en cada girita presidencial cuando en los tiempos faraónicos del PRI los jefecitos de prensa de los gobernadores premiaban a los reporteros con un embute para escribir bien de su góber.
Así, cuando el jefe de prensa entregaba el sobre a “El hijo del Santo”, Rodolfo Guzmán se ponía serio. Y lo palmeaba. Y calculaba el número de billetes. Y luego, abría el sobre y con la yema de los dedos acariciaba con delicadeza el billete para adivinar la denominación sin mirarlo, escudriñando cara a cara, frente al frente, al vocero del gobernador.
Entonces, más serio, como si estuviera en rueda de prensa con el presidente de la república, exclamaba:
“¡Me estás ofendiendo! ¡Eso que pones a mí es muy poco para mí! ¿Cuánto crees que valgo?”.
Y de inmediato regresaba el sobre, y como en aquellas salas de prensa siempre existía una edecán para cada reportero, “El hijo del Santo” le ordenaba que nadie se le acercara, porque tecleaba sus notas del día.
Y el vocero, ni hablar, se retiraba, todo apenado, con su sobrecito…, que sin duda, y luego de la putiza, pasaba a formar parte de su cuentita bancaria, pues ni modo que lo devolviera a la secretaría de Finanzas.
 MIÉRCOLES
El embute más fregón de los tiempos
 En los años finales de la década de los 60, los 70, en el puerto jarocho operaba “La escondida”, el antro más fregón en la historia nocturna de Veracruz. La chica de menor edad tenía, de acuerdo con la ley, 18 años. La mayor, unos 24, 25 quizá.
Todas jóvenes, salían a trabajar en el antro con ropitas menores, en lencería llena de tentaciones, mostrando los atributos naturales.
El gerente se llamaba Miguel. “Miguelón” le decían porque siempre andaba con una sonrisa de niño en un cuerpo gigantesco, fornido, brazos de peleador callejero, capaz de cargar con las manos al enemigo o adversario y zangolotearlo en el aire.
Pero en aquel cuerpo monumental existía un corazón solidario con los reporteros y el embute que cada fin de semana ofrecía a todos, sin excepción, fueran del periódico o el noticiero más modesto, era una botella de presidente con los suficientes hielos y cocas, además de una de aquellas chicas a quienes, por un lado, las exentaba del pago del derecho de piso; por el otro, les ordenaba que fueran cariñosas con los pobres tundeteclas sin cobrar un solo centavo, además.
A cambio, claro, los reporteros sabían que ningún escándalo armado adentro de “El patio”, y/o en la calle podía publicarse.
Y como las chicas aquellas andaban entre 18 y 24, quizá 25 años, se volvían hasta novias de los reporteros para ir al cine, al restaurante, al centro comercial.
Fue el embute más inolvidable de aquellos años…
 JUEVES
Miguel Alemán ordenó filmar el embute…
 El presidente Miguel de la Madrid institucionalizó el embute y aquellos que lo aceptaban figuraban, incluso, en la nómina.
Pero años después, con el gobernador Miguel Alemán Velasco, además de que el embute también adquirió validez oficial, el secretario General de Gobierno, Flavino Ríos Alvarado, tuvo la ocurrencia genial de que el embute sería filmado.
Así, ordenó a la secretaria a cargo del embute instalara una cámara de filmación en su privado para registrar ese momento cumbre y estelar y guardar un testimonio de que equis reportero entraba al embute.
Pero, además, en su ocurrencia, Flavino también ordenó que cada reportero entregara una copia de la credencial de elector, y más todavía, firmara de recibido el embute que ahí, en el privadito, tipo René Bejarano con el playboy argentino, Carlos Ahumada, daba a cada uno.
Así, el embute pasó a ser filmado, firmado de recibido y con una copia del IFE.
Y no obstante, todos le entraban.
Vaya perversidad política…
  VIERNES
Scherer rechazó el embute…
 El joven Julio Scherer era reportero de Excélsior y cubría la secretaria de la Reforma Agraria y la UNAM.
Un día el jefe de prensa de la SRA le llamó para informarle que a partir de la fecha podría recoger su cheque quincenal como “un modesto y sencillo estímulo” para su trabajo reporteril.
De inmediato, el joven Scherer declinó la oferta y le pidió que nunca, jamás, se le ocurriera lastimarlo ni ofenderlo con actitudes de esa naturaleza.
--Es que todos le entran, reviró el jefe de prensa.
Fino pero drástico, cordial pero firme, el joven Scherer, que había estudiado Filosofía en la UNAM, dijo:
--Ignoro si los demás. Pero yo… no.
Y siguió reporteando cada vez con más sentido crítico, él que padece indignación crónica.
Meses después descubrió que su cheque seguía emitiéndose, pero al mismo tiempo, lo cobraba otro reportero por acuerdo superior del vocero.
Y entonces, y luego del reproche, la aclaración, la precisión y el coraje, investigó, escribió y publicó un gran reportaje denunciando la corrupción gubernamental con los trabajadores de la información.
POSDATA: hay en Veracruz dos opciones de periodismo marginal: blog.expediente.mx y elcronista.mx. Muchas, muchísimas gracias por su visita diaria. No se arrepentirá.
 Expediente 2013
Ajuste de cuentas
Luis Velázquez
20 de julio de 2013
Nueve días después de la elección del dominguito 7, la cúpula panista y perredista anunció un ajuste de cuentas.
En el caso del PAN, la expulsión, dijeron, de 120 traidores, que en el camino fueron seducidos por otros partidos, sobre todo, el PRI de Érick Lagos Hernández, el seductor de la patria chica.
Y en el caso del PRD, la expulsión de un trío clave; Uriel Flores Aguayo, diputado federal; Enrique Romero Aquino, exlíder estatal y exdiputado local; Juan Vergel, el dirigente depuesto con un golpe de Estado por el priista Sergio Rodríguez.
En comicios anteriores en Veracruz, la barredora se había consumado entre las tribus perredistas. Ahora, el fuego llegó al partido azul. Incluso, en una rara y extraña conversión ideológica donde, por ejemplo, un panista, Julio Saldaña Morán, fue nominado candidato a la alcaldía jarocha abanderado por el PRD rojo, es decir, el PRI priista.
De llegarse al ajuste de cuentas, ni hablar, significará un paso más de ambos partidos al desplome.
Olvidan, incluso, la lección aprendida por los priistas durante los últimos 12 años de Vicente Fox Quesada y Felipe Calderón Hinojosa: cuando los rojos pelean entre sí pierden en las urnas. Cuando permanecen unidos a pesar de las rebatingas ganan.
Se entendería, por ejemplo, que Julio Saldaña fuera lanzado del PAN. También, desde luego, José Ramón Gutiérrez de Velasco. Y ni se diga, Leandro Rafael García Bringas. 
Pero de allí a que unos 120 panistas serán expulsados del cielo azul, caray, parece una medida exagerada. Al final del día habría de preguntar a quién corresponde cerrar la puerta. También si existe por ahí alguien libre de culpa.
Y en el caso del PRD se trata de un hachazo más entre las elites. Romero Aquino, por ejemplo, ha sido crítico toda su vida. Pero como fue presidente municipal de Ciudad Mendoza donde luego, años después, lo fuera Sergio Rodríguez, el líder actual, se atraviesa el localismo empobrecedor de los paisanos.
Juan Vergel, por ejemplo, ha sido reiterativo: Sergio Rodríguez se prestó al juego priista para expulsarlo de la dirigencia. Y cuando ningún otro camino le restaba trabajó por la candidatura a la alcaldía de Xalapa del panista Abel Cuevas Melo. Y por eso, acaso, la cláusula de expulsión.
En el fondo, la sucia y denigrante pelea por el poder político que al mismo tiempo significa poder económico y poder social.
Peor tantito, la misma historia de siempre: Arturo Hérviz terminó conflictuado con su heredero, Rogelio Franco Castán; Alejandro “El pipo” Vázquez Cuevas se odia a muerte con Julen Rementería del Puerto.
 FORMEN SU ASOCIACIÓN POLÍTICA Y TÍRENSE AL PISO… QUE DEJA MÁS
 En la milicia, por ejemplo, las circunstancias, a veces, son diferentes.
José María Morelos ordenó fusilar a 300 realistas capturados en el campo de batalla pero Nicolás Bravo se opuso. Habló con Morelos y aceptó la decisión de su segundo. Los 300 realistas se unieron a la causa insurgente.
Sin embargo, Ernesto “El ché” Guevara ordenó fusilar a los soldados de Fulgencio Batista detenidos en el campo de batalla y él mismo presenció el fusilamiento.
Victoriano Huerta ordenó, primero, cortar la lengua al senador y periodista, Belisario Domínguez, para que dejara de publicar y hablar en el Senado en su contra; después, ordenó sacar los ojos a Gustavo Madero, el hermano de don Panchito; al último, dispuso el asesinato a sangre fría de Francisco I. Madero y el vicepresidente José María Pino Suárez.
Claro, eran la guerra de Independencia y la revolución.
Pero con el ajuste de cuentas de tribus y hordas, los partidos políticos se fracturan y debilitan.
Más aún, pierden fuerza política ante la población electoral.
Y decepcionan y desencantan al ciudadano.
¡Lástima de que hombres valiosos, cada uno en su parcela y terreno de poder, sean intolerantes y ninguno ceda en sus berrinches!
Y es que si, por ejemplo, algún militante del PAN y/o del PRD se corrompió con el billete fácil, digamos, el hecho de utilizar el partido político para sus trastupijes, bien puede prestarse a una demanda penal.
Sin embargo, todos callan y se quedan en la expulsión.
Luego, llega otro militante, líder, con más fuerza partidista y la historia vuelve a reproducirse. Otro golpe de estado. Otro complot. Otro ajuste de cuentas. Otras expulsiones.
Por eso, entre otras razones, la fragilidad del PAN y PRD en Veracruz. Los otros partidos, ya sabemos, fueron paridos por el tricolor: El AVE, el Cardenista, el PANAL, el PV, condenados, hasta ahora, a gravitar alrededor del PRI para amarrar la sobrevivencia.
Cúmplase, entonces, la expulsión de los 120 panistas traidores. Cúmplase la expulsión del trío de perredistas.
Y como sucede en el bachillerato con los candidatos a presidentes de la sociedad de alumnos que son derrotados… formen su propio partido. Mínimo, su asociación política, que por algo se empieza.
Y, claro, busquen la protección oficial y tírense al piso de la elite priista. Así llegarán al poder lo más pronto posible. 
POSDATA: Hay en Veracruz dos opciones de periodismo marginal: blog.expediente.mx y elcronista.mx. Muchas, muchísimas gracias por su visita diaria. No se arrepentirá.
 Barandal
 •El polvorín SAS
•Ranulfo, el regreso
•Manzur, a SEFIPLAN
 Luis Velázquez
20 de julio de 2013
 PASAMANO: la disputa por el manejo del SAS, Sistema de Agua y Saneamiento, con sede en el puerto jarocho, pero que incluye Boca del Río y Medellín, ha incendiado el escenario político cuando faltan cinco meses y medio para el periodo constitucional de los nuevos presidentes municipales… La rebatinga, como se sabe, es por lo siguiente: el SAS ejerce un presupuesto anual de unos 400 millones de pesos, más, mucho más del presupuesto anual, digamos, de las secretarías de Turismo (Harry Grappa Guzmán) y de Desarrollo Económico (Érik Porres Blesa) del gabinete duartista… Pero, además, desde tiempos inmemoriales se ha sostenido que SAS constituye la caja chica y grandota de la elite gobernante en turno, pues cuando la mayoría de alcaldes son priistas, el destino del erario es priista, pero cuando ha sido panista, el recurso público ha terminado, digamos, en las campañas azules, de entrada, y luego, un fin oscuro, siempre, en ambos casos, PRI y PAN, en la impunidad… Así, y de cara al mes de enero 2014, el alcalde jarocho es priista, mientras los presidentes municipales de Boca del Río y Medellín  panistas… Y por tanto, tienen prioridad en la toma de decisiones de SAS, entre ellas, nombrar al titular y al resto de funcionarios… Y, claro, al reparto del billete… Y es ahí donde SAS se ha convertido en la manzana de la discordia… Y más, mucho más, porque el nuevo alcalde boqueño será Miguel Ángel Yunes Márquez, hijo del enemigo público número uno de Fidel Herrera y Javier Duarte, a saber, Miguel Ángel Yunes Linares, alias “El chucky”…
 BALAUSTRADAS: más que el alcalde de Medellín, Yunes Márquez, dado su temperamento y carácter, traerá a “chilillazos” a su homólogo de Veracruz, Ramón Poo Gil, a quien, incluso, hasta podría chamaquear, pues ha sido alcalde, diputado local de oposición y coordinador estatal del programa Oportunidades de la Secretaría de Desarrollo Social… A menos, claro, que nombrara un asesor jurídico igual de bragado y competente… Lo anterior tiene explicación por lo siguiente: desde el sexenio próspero han lanzado la ocurrencia de que el CAEV, que absorbe los sistemas de agua del estado, incorporará al SAS a su régimen administrativo y, por tanto, se la quitará a los alcaldes de Veracruz, Boca del Río y Medellín… Incluso, en un primer avisito, el titular de CAEV, Pedro Montalvo, habló de que las condiciones estaban dadas para atraerse al SAS… Y luego, cuando la víbora chillara, como que reviraron… Sin embargo, hacia el interior del gabinete se habla de que el proceso de incorporación de SAS al CAEV se está planeando lo más pronto posible para que corresponda a la LXII Legislatura, que terminará funciones en el mes de agosto, tal operación audaz y temeraria…Y audaz y temeraria por lo siguiente… 1) Si el gobierno estatal quita al trío de alcaldes, más bien, al dueto, Boca del Río y Medellín, el SAS, entonces Yunes Márquez llevará el asunto a la Cámara de Senadores, a través de su hermano Fernando, convocando el espíritu del artículo 115 Constitucional… 2) Y si se considera que la relación política entre el peñismo y el PAN y el PRD pende de alfileres, por ahí brincará un escándalo más… 3) Claro, sin contar que el jefe del clan de los Yunes azules, Yunes Linares, de igual manera tirará su espada en prenda… 4) Y si algún duartista acelerado se obsesiona con quedarse con la prebenda del SAS (400 millones de pesos anuales), imagine el lector la gran bronca por estallar, digamos, en los primeros meses  del año 2014…
 ESCALERAS: además, “la mano que mece la cuna” está filtrando en la prensa escrita (midiendo la temperatura política y social) el posible regreso de Ranulfo Márquez Hernández a la delegación federal de la Secretaría de Desarrollo Social y de Salvador Manzur Díaz a la Secretaría de Finanzas y Planeación… De ser así, se trataría de un frente bélico peor, parecido, al caso del SAS… Bastaría recordar que Ranulfo fue despedido, en rueda de prensa, por la secretaria Rosario Robles Berlanga, a quien el presidente Enrique Peña Nieto le dijo, sobre el caso, “no te preocupes, Rosario”… Y mientras tanto, el despido de Manzur a SEFIPLAN se consumó por instrucciones de Los Pinos, cuando la cúpula nacional del PAN y PRD lo exigieron como un preámbulo para regresar al Pacto México, y cuya decisión fuera comunicada a través del subsecretario de Gobernación, Luis Enrique Miranda Nava, quien fuera seis años secretario General de Gobierno con Enrique Peña Nieto gobernador en el estado de México, y por tanto, quizá, acaso, con tanta confianza, o más, que Miguel Ángel Osorio Chong… Así, pues, y en medio de tal contexto visualice el lector la tempestad política en puerta en el Golfo de México que llegará a Xalapa, allí donde por tres periodos (de 1829 a 1830) despachara como gobernador Antonio López de Santa Anna, el político más hábil de la época en las artes marciales de la diplomacia y la negociación…
POSDATA: Hay en Veracruz dos opciones de periodismo marginal: blog.expediente.mx y elcronista.mx. Gracias, muchas gracias por su visita diaria. No se arrepentirá.
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