RECOMENDABLE DETECTAR EL AUTISMO EN ETAPAS TEMPRANAS

Xalapa, Ver., a 2 de abril 2013

El médico de la Coordinación de Prevención y Atención a la Salud del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), José Luis Barradas Velásquez, dio a conocer que el autismo es un trastorno que suele diagnosticarse en la niñez. Los síntomas más importantes son problemas de socialización, comunicación y puede caracterizarse por conductas repetitivas.
“Estudiosos de la salud del IMSS han investigado que este mal es un trastorno del desarrollo que aparece en los primeros tres años de la vida y afecta el desarrollo cerebral”.
Con respecto a las causas, dijo que los factores genéticos parecen ser importantes. De manera similar, las anomalías del lenguaje son más comunes en familiares de niños autistas, e igualmente las anomalías cromosómicas y otros problemas del sistema nervioso (neurológicos) también son más comunes en las familias con autismo.
“En el Seguro Social seguimos trabajando en materia y encontramos que muchas otras causas posibles que causan autismo, pero no se han comprobado, implican una mala dieta, cambios en el tubo digestivo, intoxicación con mercurio, incapacidad del cuerpo para utilizar apropiadamente las vitaminas y los minerales, así como sensibilidad a vacunas”.
Barradas Velásquez indicó que otros trastornos generalizados del desarrollo de este mal abarcan síndrome de Asperger, síndrome de Rett, trastorno desintegrativo infantil y trastorno generalizado del desarrollo no especificado de otra manera (PDD-NOS, por sus siglas en inglés), también llamado autismo atípico.
“Los niños con autismo se caracterizan por presentar dificultades en juegos actuados, interacciones sociales y comunicación verbal y no verbal. Algunos niños con autismo parecen normales antes del año o los 2 años de edad y luego presentan una "regresión"
súbita y pierden las habilidades del lenguaje o sociales que habían adquirido con anterioridad”.
Explicó que las personas con autismo pueden ser extremadamente sensibles en cuanto a la vista, el oído, el tacto, el olfato o el gusto (por ejemplo, puede negarse a vestir ropa "que da picazón" y se angustian si se los obliga a usar estas ropas) y experimentar angustia inusual cuando les cambian las rutinas.
Por otro lado expuso que se debe practicar periódicamente un examen para la evaluación del desarrollo en todos los niños en las consultas con el pediatra y, es posible que se necesiten exámenes adicionales, si existe alguna preocupación por parte del médico o de los padres.
“A estos niños se les podría practicar una evaluación auditiva, un examen de plomo en la sangre y otro para detectar autismo. Una evaluación diagnóstica del autismo incluirá con frecuencia un examen físico y del sistema nervioso (neurológico) completo”
Finalmente sostuvo que a intervención temprana, apropiada e intensiva mejora en gran medida el resultado final de la mayoría de los niños pequeños con autismo. La mayoría de los programas se basarán en los intereses del niño en un programa de actividades constructivas altamente estructurado. Las ayudas visuales con frecuencia son útiles.
El tratamiento es más exitoso cuando apunta hacia las necesidades particulares del niño. Un especialista o un equipo con experiencia deben diseñar el programa individualizado para el niño. Se dispone de varias terapias efectivas, como: análisis del comportamiento aplicado (ABA, por sus siglas en inglés), terapia ocupacional y terapia del lenguaje y del habla.