POZA RICA, Ver., 25 de
noviembre de 2012
Licenciado Felipe Calderón Hinojosa, Presidente de los Estados Unidos
Mexicanos; señor Gobernador de Veracruz, licenciado Javier Duarte de Ochoa;
licenciado Jordy Herrera Flores, Secretario de Energía; licenciado Marco
Aurelio Alarcón Trueba, Presidente Municipal de Poza Rica; amigos de los medios
de comunicación; compañeros petroleros.
Para todos los que laboramos en Petróleos Mexicanos, es un gran honor contar
con la presencia del Presidente de México, en este complejo procesador de gas
Poza Rica, con motivo de la inauguración de una nueva planta criogénica.
Para mí, es motivo de particular satisfacción estar en estas tierras
veracruzanas, en donde Petróleos Mexicanos lleva a cabo buena parte de sus
actividades.
Quiero aprovechar este momento para agradécele a mis amigos veracruzanos, el
Gobernador Duarte, el señor Presidente Municipal Gandara Andrade, por su
hospitalidad y por la disposición que han mostrado en todo momento para
colaborar con nuestra empresa en los diversos aspectos de nuestra operación.
La planta que se inaugura el día de hoy, era indispensable para poder procesar
el gas húmedo dulce, proveniente de los cientos de pozos de Chicontepec. Con la
terminación de esta nueva obra, será posible procesar 200 millones de
pies cúbicos adicionales de gas, mediante el proceso de enfriamiento y alta
presión, que permitirá extraer gas LP y gasolinas naturales del gas húmedo,
previo a que este se inyecte al gas natural de los ductos, para su
distribución.
Esta obra viene a sumarse a otras muchas que, en conjunto, han
significado un desarrollo de la industria petrolera durante la Administración del
Presidente Calderón, que no tiene precedente en muchas décadas.
La industria petrolera, como es bien sabido, ofrece una rentabilidad muy alta,
pero se caracteriza por los largos periodos de maduración de sus proyectos y la
gran cantidad de recursos de inversión que estos requieren.
Por ello, para tener éxito en esta industria, es imprescindible ver más allá
del corto plazo.
Es necesario entender que las decisiones que tomamos hoy, determinarán lo que
sucede con la producción dentro de cinco, diez o más años.
En México, dada la importancia a la riqueza petrolera para la economía
mexicana, dado el peso de PEMEX en los ingresos petroleros, es requisito
de mirar a largo plazo, es no sólo comisión de éxito para la industria, sino,
también, factor esencial para la estabilidad y el desarrollo del país.
Y afortunadamente para todos los mexicanos, la marca de su Administración en
materia petrolera, señor Presidente, ha sido, precisamente, la visión de largo
plazo con que se tomaron las decisiones estratégicas en Petróleos Mexicanos.
Gracias a esa visión, PEMEX ha podido movilizar los recursos de inversión
necesarios para comenzar a revertir la caída de la producción que se inició con
la declinación de Cantarell, a partir de 2004.
En 2012, por tercer año consecutivo, la producción se ha mantenido estable, y
está empezando a repuntar. En este mes de noviembre, el último de su
Administración, estamos produciendo un promedio de dos millones 580 mil
barriles diarios, cifra que no se registraba desde principios de 2010.
En diciembre, estimamos llegar a los dos millones 600 mil, 50 mil barriles más
que el promedio del año pasado. Más importante aún, el aumento de la inversión
en exploración nos ha permitido alcanzar una tasa de reposición de reservas que
garantiza que la producción alcanzada se sostenga en el futuro.
La tasa de restitución de las reservas probadas 1P, que era de 41 por ciento en
2007, superó el 100 por ciento en 2011. Y los descubrimientos recientes, nos
dan la certeza de que cuando se emita la certificación de volumen de reservas
para el 2012, en los primeros meses del 2013 volveremos a superar el 100 por
ciento.
Por lo que hace a la reserva 3P, las que junto con los recursos prospectivos
marcan la ruta a seguir para garantizar la producción futura de hidrocarburos,
los resultados de esta Administración son igualmente satisfactorios.
Por cuarto año consecutivo, en 2011, las actividades exploratorias dieron lugar
a una tasa de restitución de la reserva superior al 100 por ciento y, en 2012,
los descubrimientos de nuevos yacimientos nos permitirán superar, nuevamente,
con creces la producción del año.
México puede hoy, a diferencia de lo que se pronosticaba hace seis años, ver
con confianza el futuro de su industria petrolera. La decisión de volver a
invertir en la industria petrolera, ya comienza a dar frutos.
Sin embargo, el avance más trascendente de estos años, es que Petróleos
Mexicanos ha desarrollado las capacidades para explotar los recursos de los que
depende la producción petrolera del futuro.
Estas capacidades no son algo que se adquieren de la noche a la mañana, no son
algo que se pueden comprar en el mercado; son el fruto de muchos años de
esfuerzo y dedicación de nuestros técnicos e ingenieros que poco a poco, con
tesón, van acumulando el conocimiento y las habilidades que, al cabo del
tiempo, permiten extraer los recursos de yacimientos cada vez más complejos y
de más difícil acceso.
En el caso de aguas profundas, este lento proceso de acumulación de
conocimiento y habilidad ya ha dado resultados.
Primero. Con el yacimiento de gas y líquidos de Lakach, que comenzará a
producir comercialmente en 2015, y luego con los descubrimientos de
aceite ligero en Trión y Supremo, que se anunciaron recientemente.
Chicontepec, lo que llamamos Aceite Terciario del Golfo, tal vez no llama tanto
la atención del público, pero su desarrollo es tanto o más importante que el de
aguas profundas.
Aquí, se encuentra el 40 por ciento de las reservas 3P, de hidrocarburos del
país, y aquí, y en yacimientos colindantes, se encuentra la mitad de los
recursos prospectivos no convencionales.
Los retos tecnológicos y operativos que, por sus características geológicas
presentan estos yacimientos, son si cabe, mayor a los que enfrentamos en aguas
profundas.
Se ha señalado, en ocasiones, que PEMEX no debería invertir en Chicontepec. Se
ha dicho que el costo de desarrollo de extracción en Chicontepec, alrededor de
30 dólares por barril, es demasiado alto, y que Petróleos Mexicanos no cuenta
con la capacidad tecnológica de explotar Chicontepec de manera rentable.
Estas expresiones, en nuestra opinión, deben ser, al menos, calificadas de
miopes. Por un lado, es evidente, al hacer el balance de recursos del país, que
en el futuro, en la próxima década, será indispensable contar con Chicontepec
para sostener la producción de crudo.
En segundo lugar. Debemos considerar que tan sólo las reservas probadas
incrementales que se han certificado como parte de este proyecto, y que
ascienden, ascenderán a finales de 2012, a más de 900 millones de barriles, entre
2007 y 2012, equivalen, a precios de hoy, a más de 80 mil millones de dólares
de ingresos futuros; más de 30 años de producción a niveles actuales.
Y al valor que representan estas reservas, debemos sumarle el valor de la
creciente producción de extractivo. En suma, de manera inevitable y, al igual
que en muchos otros países, la producción de crudo en el futuro tendrá
costos más altos que lo que ha sido nuestra experiencia en el pasado.
Pero, aun así, invertir en reservorios, como los de Chicontepec, representa una
de las oportunidades de inversión más rentables de nuestro país.
Por otro, debe reconocerse que el desarrollo de la tecnología y los sistemas de
producción para campos como éste, llevan tiempo y suponen un largo proceso de
investigación aplicada para optimizar la operación.
Este proceso lo iniciamos aquí, en Chicontepec, hace varios años. Y, al igual
que en aguas profundas, ya comenzamos a ver los resultados. La producción
de crudo en ATG se ha multiplicado casi por tres, en los últimos seis
años; y ya, en este mes de noviembre, supera los 76 mil barriles diarios.
Esto ha sido posible mediante el desarrollo de nuevas tecnologías de
perforación de pozos no convencionales. Esto es, pozos horizontales, de ángulo
alto y multifracturados para incrementar el área de contacto con el yacimiento,
y así obtener un incremento significativo en la producción y minimizar el
volumen de aceite residual.
Las tecnologías probadas aquí, en Chicontepec, adicionalmente, nos permitirán
desarrollar los recursos de gas y aceite en Lupitas, la otra gran fuente de
recursos prospectivos no convencionales del país.
Mucho más rápido que lo esperado, los
retos que plantean ambos tipos de yacimiento son similares. El entendimiento de
los yacimientos, la experiencia y el conocimiento acumulado, nos permiten ahora
pasar a una nueva etapa de explotación masiva, la cual, dada la magnitud del
esfuerzo requerido, se llevará a cabo con la participación complementaria del
sector privado.
Que en los últimos días, y después de un largo proceso de varios meses, el
Consejo de Administración de Petróleos Mexicanos autorizó la realización de una
ronda de licitaciones de contratos integrales para Chicontepec.
Se trata de seis áreas que, se espera, se puedan asignar en julio del 2013, y
que, en conjunto, representan 15 por ciento de las reservas totales del Activo
Terciario del Golfo.
Dentro de 15 años, que es cuando esperamos que
la producción de Chicontepec alcance su nivel máximo de producción, de
alrededor de 450 mil barriles diarios, la producción incremental de las seis
áreas licitadas alcanzará alrededor de un tercio del total.
La inversión total esperada a lo largo de los contratos integrales de
exploración a licitar en julio de 2013, en Chicontepec, que han sido posibles,
gracias a la reforma aprobada en 2008, es del orden de 153 mil millones de
pesos y estamos requiriendo un porcentaje de contenido nacional, de cuando
menos, 25 por ciento.
Este proyecto, así, contribuye a cumplir, también, con el mandato de convertir
a PEMEX en factor de desarrollo en la industria nacional.
En Petróleos Mexicanos estamos convencidos de que en materia petrolera, su
Gobierno entrega buenas cuentas.
Gracias por la confianza que depositó en los petroleros. Gracias, también, por
la visión de largo aliento que nos alentó a desarrollar los proyectos sobre los
que descansa la riqueza petrolera futura de México, como son los de aguas
profundas, y estos que vemos en Chicontepec.
Entrega, usted, un PEMEX fortalecido, con mayores y mejores capacidades tecnológicas
y organizativas. Un PEMEX en el umbral de una nueva etapa de crecimiento para
seguir sirviendo a México.
Entrega usted un PEMEX que es garantía de que la industria petrolera seguirá
siendo motivo de orgullo para todos los mexicanos y seguirá siendo un pilar
fundamental del desarrollo de México.
Licenciado Felipe Calderón Hinojosa, Presidente Constitucional de los Estados
Unidos Mexicanos; licenciado Javier Duarte de Ochoa, Gobernador Constitucional
del Estado de Veracruz; doctor Juan José Suárez Coppel, Director General de
Petróleos Mexicanos; maestro Dionisio Pérez-Jácome Friscione, Secretario de
Comunicaciones y Transportes. Bienvenido, Secretario.
Sergio Lorenzo Quiroz, líder de la
Sección del Sindicato Petrolero y representante de Carlos
Romero; trabajadores petroleros.
Pero particularmente y muy significativo para mí, trabajadores de Pemex Gas y
Petroquímica Básica, muchas gracias por haberme recibido hace algunos años.
Alejandro Martínez, Armando Arenas, señoras y señores, distinguidos invitados.
Como ya lo dijo el Director de PEMEX, hoy, nuestra empresa está fortalecida. En
la Administración
del Presidente Calderón, logramos superar la declinación en la producción, y
ahora tenemos una empresa transformada, una empresa en crecimiento, una empresa
modernizada y que mejora cada día, cada uno de sus procesos.
Uno de los elementos cruciales para esta transformación, fue el monto de
inversión física que se destinó a fortalecer a Petróleos Mexicanos; un monto
que representa un máximo histórico, un monto de 1.5 millones de millones de
pesos, superando en 60 por ciento, más que la Administración
anterior, y 2.5 veces la inversión que fue realizada hace dos administraciones.
Esto, por supuesto, se ha reflejado en inversiones mayores no sólo en Pemex
Exploración y Producción, sino, también, en cada una de las otras subsidiarias.
Podremos hablar en Refinación, por ejemplo, de la Reconfiguración de
Minatitlán, de los combustibles limpios; en Petroquímica, de la planta de
aromáticos, y en Pemex Gas, por ejemplo, la planta de cogeneración allá, en
Tabasco, y esta hermosa planta que tenemos el día de hoy.
Tan sólo para Pemex Gas y Petroquímica Básica, el presupuesto creció en 50 por
ciento con respecto a la efectuada en el mismo periodo de la Administración
pasada.
Como resultado, la infraestructura de Pemex Gas y Petroquímica Básica se
ha ampliado y se ha modernizado muy rápidamente.
Qué mejor ejemplo para poder hablar con hechos de lo realizado, que esta planta
criogénica, con una capacidad de procesamiento de 200 millones de pies cúbicos
diarios de gas húmedo dulce, que permite responder al nuevo entorno del sector.
El sector energético está cambiando.
Como
ustedes saben, el desarrollo en las tecnologías de perforación horizontal y el
fracturamiento hidráulico permiten ahora el desarrollo y la explotación
de los recursos de shale, no sólo shale gas, como ya sucedió con nuestro vecino
del Norte, sino, también, y en esta región, en particular, lo que habrá de
venir en los próximos años con shale gas o Gas Lupita, pero, también, con crudo
proveniente de estas mismas fuentes, marcando lo que, sin duda, será un gran
hito en el sector energético en los años por venir.
Como consecuencia de este desarrollo tecnológico, nosotros sabemos que el
precio del gas ha venido reduciéndose hasta casi un 80 por ciento, ya no tiene
relación alguna con el precio del crudo y ahora está transformando a la región
entera de importador neto de gas a un exportador neto, como, también, habrá de
serlo nuestro país.
Como resultado, también, de esto, cada vez es mayor la demanda por el gas
natural, ésta se ha incrementado notablemente y se espera que la tendencia a la
alza, como ha sucedido en esta Administración se mantenga y perdure en los
próximos años.
Esto, sin duda, son buenas noticias para México. Según los cálculos de la Agencia de Información de
Energía del Gobierno de los Estados Unidos y la Agencia Internacional
de Energía, un poco más del 10 por ciento de los recursos del mundo en este
tipo de configuración o en Shale Gas, son parte de los recursos naturales
de nuestro país.
Por eso decidimos, con el liderazgo del Presidente Calderón, a desarrollar una
estrategia integral que nos está preparando desde ahora para aprovechar esos
recursos con plenitud.
Hemos asignado ya más de tres mil millones de pesos para poder dar la
caracterización a detalle de este tipo de recursos, tanto el gas, en campos
denominados de Shale, pero también, el crudo que está ligado a ello.
Y ya tenemos las primeras perforaciones, ya tenemos seis pozos de Shale Gas en
el territorio nacional.
Pero, no se trata solamente de la pura extracción de los recursos. Se trata de
darle valor agregado en el proceso de transformación, y así contribuir a las
cadenas en la industria petrolera.
Considerando que un importante porcentaje de los recursos de Shale vienen con
líquidos, podemos llegar a la conclusión que en nuestro país nos estaremos
enfrentando, también, a este gran reto, no sólo de la extracción, sino, también
y, sobre todo, poder separar estos recursos y obtener mucho mayor valor en el
proceso.
En este contexto, es fundamental para PEMEX que se le permita ampliar la
capacidad de producción de gas natural. De hecho, tanto del gas natural,
como de todos los derivados, como sucedió en esta Administración, tanto
en el gas natural como en la producción particular del Gas LP. Y una vez más,
esta planta es muestra de ello.
Por otra parte. Si estamos aprovechando el gas producido de los campos, se
evita la emisión de gas a la atmósfera y la utilización de estos gases para
combustión, se mitigan la emisión de gases de efecto invernadero y se evita que
se estén enviando a la atmósfera.
De esta manera, también, Petróleos Mexicanos avanza con el cumplimiento de las
metas de cuidado y preservación del medio ambiente.
Además de conjugar estos elementos del nuevo paradigma en Petróleos Mexicanos,
con más infraestructura, con infraestructura moderna, con generación de empleo
eficiencia al uso de la energía, eficiencia al uso del agua, seguridad, cuidado
y preservación del medio ambiente, esto es el PEMEX que estamos dejando hacia
el futuro.
Esta
planta, esta criogénica, simboliza la adopción y la implementación de nuevas
tecnologías, tecnología de vanguardia, que preparan a PEMEX Gas, pero en sí
están preparando a Petróleos Mexicanos para la etapa que, sin duda, habrá de
venir.
Con
inversiones sin precedente para el fortalecimiento de PEMEX, así como el
impulso decidido a la modernización de la industria energética nacional y un
sincero compromiso con el cuidado del medio ambiente, hemos construido y hemos
dejado los cimientos de un sector energético moderno, próspero y, sin duda,
comprometido con el medio ambiente.
Un
sector energético renovado, capaz de sobresalir en el entorno global,
comprometido a fondo con las siguientes generaciones comprometido a fondo
con el medio ambiente, con la solidez suficiente para que PEMEX siga impulsando
el crecimiento de nuestro país.
Es
un honor, para mí, poder cerrar esta etapa de eventos en Petróleos Mexicanos,
en estas instalaciones de PEMEX Gas. Y no me resta más que agradecerle a
la familia petrolera, agradecer al Presidente de la República, el haber
podido estar aquí el día de hoy.
Saludo y doy la bienvenida al licenciado Felipe Calderón Hinojosa, Presidente
de nuestra República Mexicana.
De la misma manera, saludo al licenciado Jordy Hernán Herrera Flores,
Secretario de Energía; al maestro Dionisio Pérez-Jácome Friscione, Secretario
de Comunicaciones y Transportes.
Saludo al doctor Juan José Suárez Coppel, Director General de PEMEX; al maestro
Fausto Barajas Cummings, Subsecretario de Infraestructura de la Secretaría de
Comunicaciones y Transportes; al ingeniero Carlos Morales Gil, Director General
de Pemex Exploración y Producción; al ingeniero Alejandro Martínez Sibaja,
Director de Pemex Gas y Petroquímica Básica.
Saludo al Diputado Eduardo Andrade Sánchez, Presidente de la Mesa Directiva del
Honorable Congreso del Estado; al Magistrado Alberto Sosa Hernández, Presidente
del Honorable Tribunal Superior de Justicia del Estado.
Me es muy grato saludar al General René Carlos Aguilar Páez, Comandante de la VI Región Militar.
De manera muy significativa, saludo al licenciado Alfredo Gándara Andrade,
Presidente Municipal de Poza Rica.
Y,
asimismo, me es muy grato saludar a mi amigo Sergio Lorenzo Quiroz Cruz,
Secretario General de la
Sección 30 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana
y representante personal de don Carlos Romero Deschamps.
Los
veracruzanos recibimos como una distinción especial esta segunda visita en la
semana, del señor Presidente de la
República , Felipe Calderón Hinojosa, que subraya el interés y
el cariño que le tiene, el señor Presidente, al Estado de Veracruz.
Sabe
usted, señor Presidente, que es usted muy correspondido por el pueblo
veracruzano.
Ahora, le damos la bienvenida en esta tierra, que es cuna de la industria
petrolera nacional. Desde hace más de un siglo, el Norte de Veracruz fue
pionero al aprovechar esta riqueza natural que ha sido, desde entonces, pilar
del desarrollo nacional.
De las bondadosas tierras de municipios como Papantla, Poza Rica y Cerro Azul,
surgió con mucho esfuerzo la extracción de crudo.
Una producción petrolera que marcó el rostro de nuestra economía y política
durante el Siglo XX, y que es indicador del rumbo por el que transitaremos el
resto del Siglo XXI.
En esta nueva etapa de Petróleos Mexicanos, impulsada por la Presidencia de la República , seguimos
siendo punta de lanza.
Una instalación que proyecta la capacidad de PEMEX para atender la demanda
nacional de propano, butano y gasolina natural, se inserta en una región con
probada vocación petrolera, donde los próximos años seguiremos teniendo buenas
noticias en el sector.
Vale la pena mencionar que, hace seis años, pensar en construir infraestructura
como ésta, era financieramente inviable. Gracias a la visión del Presidente
Calderón, y al apoyo de las fuerzas políticas representadas en el Congreso de la Unión , fue posible realizar
la más importante reforma de este sector, en décadas.
A sólo cuatro años de esta reforma, ahora tenemos un
PEMEX más fuerte, saneado y con un
horizonte prometedo
Los veracruzanos nos sentimos orgullosos de esta paraestatal, que quintuplicó
su inversión en infraestructura y que logró revertir la tendencia negativa en
las reservas de crudo.
Se conjuró el fantasma que amenazaba a PEMEX y a todo el país a corto plazo,
que era la de tener que importar petróleo crudo.
Veracruz ha sido testigo y partícipe de hechos decisivos en la historia de esta
gran empresa. La multiplicación de esfuerzos en materia de exploración, se
reflejó en el descubrimiento de importantes yacimientos de crudo y de gas
frente a nuestras costas.
Por primera vez, en más de 20 años, PEMEX abanderó un barco mexicano, y nuestra
flota petrolera, que alguna vez fue orgullo nacional, recuperó su lustre.
Registrada esa embarcación en Coatzacoalcos, ahora lleva el nombre de ese
puerto escrito en la popa, y viaja en el mundo llevando consigo una parte de
nosotros.
De igual modo, se logró reconfigurar la centenaria refinería de Minatitlán,
proyecto equivalente a construir una nueva, junto a la que ya existía. Todo
esto, ha sido posible cumpliendo un compromiso fundamental con los mexicanos:
que el petróleo siguiera siendo nuestro.
Los trabajadores petroleros y todos los mexicanos, ahora tenemos la
tranquilidad de que nuestra más importante paraestatal sigue en nuestras manos.
Pero en condiciones relanzadas, que significa una transformación profunda de su
destino, que es, en muchos sentidos, el de todos los mexicanos.
Los veracruzanos vemos con optimismo fundado, un futuro promisorio para esta
gran empresa. Veracruz es tierra de petroleros; mujeres y hombres laboriosos
que portan con orgullo el uniforme de la paraestatal, como herencia de varias
generaciones sirviendo a esta industria.
Para nosotros, lo que usted ha hecho por PEMEX representa un aliento para el
desarrollo económico y social de nuestro estado.
Somos ricos en yacimientos, pero, también, poseemos lo necesario para
aprovecharlos: gente confiable, honrada y valiente, que sabe trabajar y agregar
valor a esta industria.
La familia petrolera veracruzana, al lado de su Sindicato, nunca olvidará la
certeza y viabilidad que se le dio a PEMEX en su Presidencia.
El Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana
ha sabido convertirse en aliado de la productividad en la empresa, y
comprometerse con el futuro de la
Nación.
Gracias a esta suma de esfuerzos compartidos, el petróleo se mantiene como
palanca de prosperidad para Veracruz y para todo México.
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