CONSUMO DE ALCOHOL PUEDE CAUSAR HÍGADO GRASO

Xalapa, Ver., a 30 de agosto 2012         Comunicado No. 4864-12

El hígado graso es la acumulación de grasas en la célula hepática (hepasito) y es una enfermedad inflamatoria de origen metabólico que afecta al hígado, así lo detalló el médico de la Coordinación de Prevención y Atención a la Salud del Instituto Mexicano del Seguro Social, José Luis Barradas Velásquez.

Al respecto el médico agregó que este padecimiento es la segunda o tercera enfermedad hepática crónica más frecuente. Al hígado graso se lo conoce también como esteatosis cuando hay infiltración (depósito) de grasa intrahepática y esteatohepatitis cuando además hay inflamación.

“También existe otro tipo de hígado graso, que esta dado por la ingesta de alcohol. A este tipo se le conoce como esteatosis alcohólica, por ello se recomienda evitar el consumo de bebidas embriagantes y así evitar este mal”.

Barradas Velásquez indicó que no se conoce la causa específica del hígado graso, aunque se manifiesta que es una aberración en el metabolismo de las grasas (ácidos grasos y triglicéridos), lo que conduce a una acumulación intrahepática de los triglicéridos.

“El hígado graso, probablemente se deba a un aumento en el número de casos de obesidad, la pérdida de peso o la oscilación del mismo. Lo cual predispone a esta enfermedad, como lo puede hacer la obesidad central”, subrayó.

Asimismo, dio a conocer que en los pacientes con hígado graso,  se encuentra que más de la mitad presentan fatiga persistente o malestar en el cuadrante superior derecho del abdomen o ambas cosas. Al examen físico los pacientes presentan un agrandamiento indoloro del hígado.

“Los paciente con hígado graso, son típicamente obesos (70 por ciento) o con sobrepeso, de mediana edad, con trastorno en el metabolismo del azúcar (glucosa=diabetes 20 por ciento) y grasas (colesterol y triglicéridos= hiperlipidemia 20 por ciento), o ambas”, añadió.

Por último, expuso que los pacientes con hígado graso usualmente son diagnosticados cuando acuden al médico por presentar una elevación inexplicable y persistente de las pruebas hepáticas.

“Para el manejo y control del padecimiento se recomienda: evitar el consumo de alcohol y la ingesta de medicamentos dañinos al hígado (analgésicos como paracetamol), antinflamatorios y hormonas femeninas (estrógenos). Reducción gradual de peso, evitar la rápida pérdida de peso porque empeoran el cuadro”, concluyó.