Los buenos jugadores, los mejores, los que resultan triunfadores, son aquellos que tienen la capacidad de modificar sus tácticas y hasta su estrategia sobre la marcha, si ven que las condiciones de la contienda han cambiado. Y digo “contienda” porque cualquier juego es una lucha verdadera, así como cualquier pelea es un juego, que se debe atener a ciertas reglas de combate, digamos.
El actual proceso electoral en Veracruz cae en esa consideración del párrafo anterior porque está convertido en la verdadera batalla de un contendiente fuerte y aceptado, contra dos opositores que han decidido unir sus fuerzas para crecer en sus pretensiones.
Precisamente la alianza anunciada entre el PAN y el PRD (entre el agua y el aceite) lleva la intención no de conseguir mejores resultados electorales en los 212 municipios y los 30 distritos locales, sino de doblegar al enemigo hasta ahora invencible.
Así, al aliarse dos partidos inaliables han sentado nuevas bases para la elección que tendrá su culmen el primer domingo del julio próximo.
Pero se ve que en el campo de enfrente no están mancos, y mucho menos cruzados de brazos porque, como en el ajedrez, el priismo ha empezado a cambiar movidas, a rotar piezas, a hacer enroques que le mejoren las condiciones en el campo de batalla.
En ese sentido debe entenderse el cambio que ha habido en la postulación de sus candidatos a las alcaldías de Veracruz-Puerto y Boca del Río, dos joyas de la corona, dos cerezas del pastel en esta elección en la que se pone a prueba localmente a la actual administración estatal.
La señal mandada desde lo alto, es que el tricolor irá por la opción ciudadana, al llevar como abanderados a dos empresarios de buen nombre y aceptación: Ramón Poo Gil y Sergio Pazos, que además suman su juventud y su entusiasmo por hacer bien las cosas en el ámbito público, como lo han hecho exitosamente desde el privado.
Uno y otro son caras nuevas, frescas, apolíticas; personas sin cola que les pisen; talentos que serán puestos a prueba por primera vez y que pueden congregar la aceptación de una ciudadanía HARTA de ver cómo se repiten los mismos nombres y los mismos grupos en cada elección.
Ambos harán sin duda campañas diferentes, innovadoras… pero de verdad, porque ha sido tan reiterada como incumplida la promesa de los políticos antañones de que harían las cosas diferentes, cuando no saben hacer otra cosa que repetir sus esquemas.
Bienvenidos Sergio y Ramón a estas lides. Tienen mucho bueno por hacer.
SERGIO PAZOS NAVARRETE (PRE-CANDIDATO PRI ALCALDIA BOCA DEL RIO)
RAMÓN POO GIL (PRE-CANDIDATO PRI ALCALDIA VERACRUZ)
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