Por Luis González
Romero
Poza Rica, Ver.- En
las colonias marginadas de la periferia de la ciudad se encuentran los
cinturones de miseria extrema; pero a consecuencia de lo mismo existe un ambiente
de contaminación por la falta de servicios importantes, como el agua y
drenajes, y los habitantes de dichos sectores se han visto en la necesidad de
acondicionar sus letrinas, lo cual contrasta mucho con lo que se dice y no se
hace en esta Petrópolis llamada la capital del norte de la entidad.
Incluso en colonias
cercanas a zonas comerciales, como es el caso de Villa de las Flores, hay
calles en donde no cuentan con drenaje ni agua y por lo mismo instalan sus
letrinas, en donde los colonos tienen que pagar mensualmente a empresas
especializadas para que las descarguen, las limpien y las vuelvan a dejar en su
lugar para que sigan dando el servicio.
Ese mantenimiento
tiene un costo que cada uno de los vecinos tiene que pagar de manera periódica,
como fue posible constatar dicha situación; pero hay colonias en peores
condiciones, en donde carecen de agua, drenaje, guarniciones y banquetas y
cuando llega la temporada de lluvias la gente tienen que caminar entre los
charcos y el lodo.
Expresaron en Villa
de las Flores, como también se dijo en la colonia Prensa Nacional, que en
repetidas ocasiones han escuchado las arengas, las promesas, las mentiras de
los que buscan cargos de elección popular, quienes prometen soluciones
inmediatas, pero después de muchos años siguen esperando se les haga justicia.
El asunto de las
letrinas representa un 20 por ciento en las colonias marginadas, en donde hay
olvido y miseria; pero aún hay más, en el caso de los pozos perforados y
artesianos, que sin que exista una estadística de INEGI, se estima en más de
cinco mil y son familias que no tienen el servicio del agua potable, por la
sencilla razón de que en las calles y colonias donde viven, no existen líneas
conductores de ese vital liquido.
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